El invierno y los riñones tienen una estrecha relación. El invierno pertenece al elemento “agua” en la Medicina Tradicional China. Es la estación del frío, de la humedad y de los días más cortos del año, propicia para el descanso, para recargar nuestra energía y para consumir alimentarnos de una forma consciente y saludable.
En esta estación, además, la quiropráctica nos ayuda a restablecer nuestro flujo nervioso, ya que es cuando afloran síntomas relacionados con los problemas en el sistema nervioso y en el sistema musculoesquelético, entre otros.
¿Por qué se relacionan el invierno y los riñones?
Así como en la primavera la energía es la de nacimiento, manifestándose en un estallido de vida, la energía del invierno es una energía latente y estable, que se adapta y que fluye como el agua. Con todo, esta espera del invierno ya lleva consigo la potencialidad del resurgir de la vida.
Los riñones son los encargados de filtrar toda nuestra sangre. La sangre, a su vez, transporta el oxígeno hacia todas las células de nuestro cuerpo. Los riñones también tienen la función de eliminar las toxinas y los residuos del organismo. Si somos conscientes de que un vehículo debe tener los filtros limpios y en perfecto estado para su correcto funcionamiento, ¿por qué no serlo con nuestro propio cuerpo? Nos referimos, principalmente, a la comida. Y es que, del mismo modo que la gasolina de mala calidad genera posos que acortan la vida del motor, ingerir alimentos poco saludables genera un exceso de grasa y mucosidad que se acumula en los riñones, dificultando su función excretora.
Invierno y riñones: El riñón “desriñonado”
Los riñones pueden quedarse sin energía por un exceso de uso, especialmente en períodos de estrés y ansiedad, produciéndose un desequilibrio del elemento agua.
Es normal sentirse cansado, incluso fatigado, cuando los riñones no pueden excretar, debido al continuo esfuerzo extra que realizan estos órganos. Así, el riñón empieza a retener el líquido para intentar disolver la acumulación de toxinas, provocando hinchazón. Un cuerpo tóxico es un cuerpo hinchado.
Además de causas como la alimentación, la energía del riñón se ve sumamente debilitada cuando sentimos un miedo excesivo.
Síntomas que denotan fatiga renal
Debido a la fatiga de nuestros riñones pueden desencadenarse síntomas que, en un principio, pueden parecer no tener nada en común.
El agotamiento de energía del riñón provoca:
- Osteoporosis
- Caída del cabello
- Alteraciones en el sistema reproductor
- Envejecimiento
- Caries y/o caída de dientes
- Alteraciones en el sistema nervioso
- Debilidad del sistema muscuolesquelético
- Alteraciones respiratorias, como asma y disneas
- Alteraciones urinarias, como incontinencia
- Incluso, sordera o tinitus
Las alteraciones en el sistema nervioso que produce la fatiga renal van desde la pérdida de memoria, la falta de concentración, el cansancio y la esclerosis múltiple hasta la ansiedad y la depresión.
Del mismo modo, la debilidad en el sistema musculoesquelético se traduce en una falta de coordinación, en debilidad de rodillas y en patologías lumbares.
Tonifica tus riñones con estos alimentos
Aprovecha los alimentos de temporada este invierno para tonificar tus riñones.
- Frutos secos: nueces, pistachos, avellanas.
- Alimentos del mar: cangrejo, pulpo, calamar, sepia, gambas, pescado blanco y azul, algas.
- Semillas de sésamo negro, mijo, cebada, miso.
- Frutas y verduras de temporada.
- Legumbres.
- Carnes y huevo.
Algo que va a ser muy positivo en invierno, y con el elemento agua implicado, para tus riñones es que hagas un uso predominante de cocciones largas, especialmente en guisos y sopas.
¡Aprovecha este tiempo para hacer caldos con huesos, vegetales, carnes y legumbres! Además de cuidar tus riñones, ¡están riquísimos!
Barcelona Quiropractic
Aunque lo enfoquen desde diferentes prismas, la Quiropráctica y la Medicina Tradicional China tienen un concepto de salud holístico e integral en el que se tienen en cuenta todos los hábitos que tienen las personas en el resultado de su salud global. Del mismo modo, ambas abordan el organismo como un todo inseparable en el que cada parte afecta al correcto funcionamiento del resto, y no de forma independiente.
Teniendo en cuenta esto y, en especial, que el invierno puede acarrear problemas sobre el sistema nervioso y el sistema musculoesquelético, ajustarnos de forma regular nos ayuda a reconectar todo nuestro circuito neurológico. Así mejora en conjunto todo el funcionamiento de nuestro cuerpo y su unión con nuestra mente.
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Bibliogafía
- Bindu, Ana. «Teoría de los Cinco Elementos: Agua/Invierno». Bindu, 2019, (consulta el 14 de diciembre de 2022). Disponible en http://binduyogaterapias.es/teoria-de-los-cinco-elementos-agua-invierno/
- Ignacio. «El Invierno y el Elemento Agua». Macrobioteca, 2019, (consulta el 14 de diciembre de 2022). Disponible en https://macrobioteca.com/es/invierno-elemento-agua/
- Wikipedia. «Medicina Tradicional China». Editado el 21 de agosto de 2022, (consulta el 14 de diciembre de 2022). Disponible en https://es.wikipedia.org/wiki/Medicina_china_tradicional
