Las hernias discales pueden provocar o no dolor, pero también pueden ser responsable de lesiones neurológicas.
PARA EMPEZAR
La columna vertebral esta compuesta de vértebras entre las cuales se encuentran los discos intervertebrales. Estos discos son una especie de cojines que permiten amortiguar las presiones y los choques entre las vértebras, algo así como los cartílagos entre los huesos, o los amortiguadores de un coche.
Estos discos soportan una enorme presión cuando se produce un choque, o una serie de ejercicios pesados. Si el disco es aplastado de forma repetida se empieza a fisurar y deja escapar una parte de los tejidos contenidos en su interior. En este caso hablamos de hernia discal.
La función de los discos es la de transmitir movilidad y flexibilidad a la columna y fundamentalmente la de amortiguar la transmisión de fuerzas entre las vértebras para evitar que se gasten.
Existen hernias discales sintomáticas y asintomáticas (esto significa con y sin dolor), hasta un 60% de la población se les puede diagnosticar una hernia discal a través de una resonancia magnética sin que tengan dolor. Eso no quiere decir que no hay problema sino más bien que el disco esta debilitado y puede llegar a producir problemas graves con el tiempo. Por esta razón se hace hincapié en la importancia de hacer revisiones Quiroprácticas para prevenir posibles consecuencias en el futuro si aún no las padece.
En cuanto a la protusión discal, consiste en una deformación de la parte eterna del disco. Se produce un abultamiento que a su vez, igual que la hernia discal puede irritar las terminaciones nerviosas produciendo dolores que irradian hacia las extremidades (ej. Ciática).
En general, la formación de una hernia o protusión discal es un proceso de varios años de duración (5 a 8 años), en muchos casos, como resultado de subluxaciones vertebrales, donde el desplazamiento de una vértebra con otra cambia los apoyos sobre el disco y lo debilita a largo plazo especialmente si está sometido a más presión de lo normal como levantar peso, agacharse repetidamente, etc.
HERNIA DISCAL Y CIRUGÍA
Se dice que el 90% de las cirugías por hernias discales son innecesarias y el 10% son adecuadas según la presentación clínica especifica. En muchos casos, después de la cirugía pueden aparecer con el tiempo otra vez problemas discales por no ir a la causa del problema.
Hay muchos tipos de técnicas quirúrgicas posibles, las más comunes:
Laminectimía: consiste en quitar toda la lámina de una vértebra, lo que descomprime la raíz nerviosa.
Discectomía: Consiste en extraer exclusivamente el disco herniado, sin romper ni extraer el hueso vertebral. En este caso, las vértebras pierden la función de amortiguación del disco y se crea a largo plazo problemas de artrosis importantes.
Microdiscectomía: conceptualmente es una discectomía selectiva, con una incisión y manipulación quirúrgica más pequeña y, un plazo de recuperación más breve.
Muchas hernias discales operadas están provocadas por subluxaciones vertebrales, donde un quiropráctico está entrenado y capacitado para corregirlas sin la necesidad de cirugías y/o medicamentos ¿Cuál eliges tú?
EL RINCÓN CIENTÍFICO
En un estudio científico se mostró que entre el 10% y el 40% ( 50% en algunos estudios ) de las cirugías realizadas por hernias lumbares fracasaban: de esta manera le pusieron un nombre, el «síndrome de fracaso en la cirugía lumbar». Este mismo estudio mostraba como los pacientes con este síndrome sufrían nuevamente dolores después de un período o disminuía sus capacidades laborales y actividades domésticas.
Los resultados de otro estudio científico mostraron que el 65% de los pacientes que habían recibido cirugía lumbar informaron que no sentían ninguna mejoría en su salud general un año después de la operación.
Por otro lado, también se hacen estudios científicos que apoyan el cuidado quiropráctico para pacientes con problemas de hernias discales. En un estudio, dividieron 109 pacientes con dolor de
espalda crónico durante unos 6 años de media; el tratamiento en un grupo era acupuntura, en otro medicación a través de su médico y en el otro grupo recibieron ajustes quiroprácticosUn ajuste vertebral es un movimiento veloz, seguro, indoloro y de corto rango de movimiento con el que se consigue devolver la posición natural a las vértebras subluxadas. El ajuste permite recuperar la función biomecánica de la columna vertebral, permitiendo el libre flujo de los impulsos nerviosos entre el cerebro y el resto del cuerpo.; los resultados fueron los siguientes: el grupo de medicación obtuvo una mejoría del 4%, el grupo de acupuntura obtuvo una mejoría del 5% y el grupo de ajustesUn ajuste vertebral es un movimiento veloz, seguro, indoloro y de corto rango de movimiento que el quiropráctico realiza con las manos con el que se disminuyen los efectos de la subluxación vertebral. El ajuste permite recuperar la función biomecánica de la columna vertebral, permitiendo el libre flujo de los impulsos nerviosos y restableciendo la comunicación entre el cerebro y... vertebrales mejoraron un 50% y lo mantuvieron por un largo período de tiempo.
ENTONCES, ¿QUÉ OPCIONES TENEMOS?
Muchos estudios realizados apoyaban la efectividad y la relación de coste/efectividad del cuidado quiropráctico, así como también hay estudios que reconocen su efectividad en los dolores de espalda.
En un estudio científico dirigido por el doctor quiropráctico David J. Ben Eliyahu, DC; mostró 27 pacientes con hernias discales tanto a nivel cervical como a nivel lumbar. EN el estudio se tomaron resonancias magnéticas antes y después del cuidado quiropráctico y vieron como el 63% de los casos había una reducción en el tamaño de la hernia o la hernia discal se reabsorbía completamente. También encontró que el 80% de los casos tenían antes de la lesión. Entonces el estudio mostró que la quiropráctica era efectiva a nivel clínico y también a nivel de reducción del tamaño de la hernia discal.
En otro estudio realizado por el Dr. Cassidy Et Al, sobre los efectos de los ajustes quiroprácticosUn ajuste vertebral es un movimiento veloz, seguro, indoloro y de corto rango de movimiento con el que se consigue devolver la posición natural a las vértebras subluxadas. El ajuste permite recuperar la función biomecánica de la columna vertebral, permitiendo el libre flujo de los impulsos nerviosos entre el cerebro y el resto del cuerpo. lumbares en hernias de disco, encontraron que 13 de 14 pacientes tuvieron resultados clínicos buenos. De estos, la mitad tuvieron una reducción en el tamaño de las hernias discales.